Hay maneras menos corrosivas y amigables con el medio ambiente para realizar las tareas de limpieza
Gran parte de los limpiadores comerciales contienen cloro, un compuesto químico que daña al medio ambiente y también puede ser perjudicial para la salud, ya que es un peligroso irritante de ojos, nariz y pies.
Sin embargo, hay maneras menos corrosivas y amigables con el medio ambiente para realizar las tareas de limpieza. Para un lavado diario, usa vinagre o jugo de limón para disolver la acumulación de minerales y talla con un cepillo.
Una vez por mes mezcla una taza de bicarbonato de sodio (250 ml) y una taza de sal. Vierte un cuarto de taza de esta mezcla en el desagüe. Después echa una taza de agua caliente por el desagüe y para acabar de limpiar vacía agua fría.
Para desagües tapados, vierte un cuarto de taza de bicarbonato de sodio seguido de media taza de vinagre, y para limpiar vacía agua hirviendo. Como último recurso, usa una víbora de plomero (cepillo flexible con cerdas).
Si se te cae el cabello mientras te bañas, no lo dejes ir por el desagüe ya que esto provoca que se tape. Júntalo y tíralo después de la ducha en la composta, ya que contiene nutrientes para las plantas.
Para limpiar tina y azulejos te recomendamos usar un cepillo con bicarbonato de sodio y enjuagar con agua caliente. Para las áreas de agua turbia usa vinagre o jugo de limón para disolver la acumulación de minerales.
Para trabajos realmente duros, moja un trapo con esta mezcla y déjalo en la zona del problema durante algunas horas antes de enjuagar.
Para el moho, frota y moja los azulejos con un trapo humedecido con vinagre, talla con un viejo cepillo de dientes.
Fuente: Teorema Ambiental, imagen
