Seguramente habrás oído la recomendación de revisar tu bici antes de pasear en ella y seguramente te habrás preguntado casi el mismo número de veces: ¿Qué le reviso?
A primera vista se ve completa, tiene todo: llantas, pedales, manubrio, asiento etcétera… Pues sí, pero eso no es todo lo que debes de saber, por eso aquí te dejamos los puntos básicos para que tus rodadas sean más seguras.
1) Presión de aire en las llantas:
La presión de aire no es la cantidad de aire que le cabe a las cámaras, es la cantidad de peso que tienes que aplicar para deformar el piso de las llantas y se mide en libras por pulgada cuadrada (PSI). La mayoría de las llantas requieren de una presión entre PSI y 65 PSI máximo, pero para estar seguros lo mejor es recurrir al costado de las llantas ahí encontraras además de el mínimo y el máximo de presión requerida la información referente expresada de la siguiente manera ej. 26x 2,125, que significa que la rodada de tu bici es de 26 pulgadas (rodada es la medida en pulgadas del diámetro del rin) y el número después de la “X” es la medida del diámetro de la cámara también en pulgadas. Las rodadas más comunes son 12, 14, 16 —generalmente son bicis para niños—; le siguen las rodadas 20, 24, 26, 27 y 28.
La presión del aire en las llantas no debe bajar de un día para otro, si lo hacen lo más seguro es que tengan una fuga o pinchadura y hay que acudir al mecánico.
2) Estado de las llantas:
Una llanta agrietada, reseca o desgastada es una llanta insegura y muy propensa a las pinchaduras. Además de checar el estado de las llantas, tienes que revisar que no tengan clavado o enterrado, por ejemplo, algún vidrio, alambre, astilla, clavo, etc., ya que si tienen cualquiera de estas cosas y procedes a inflarlas lo más seguro es que se pinchen en cuestión de minutos.
3) Frenos:
Para revisar los frenos lo que tenemos que hacer es presionar las palancas una a la vez y fijarnos bien al soltarlas, éstas deben regresar rápidamente a su posición original, si tardan en hacerlo podemos tener problemas con la presión de los tornillos, los resortes de las palancas o de los portazapatas, los cables o las fundas. Debes llevarla a un mecánico.
4) Asiento y manubrio:
Estos dos componentes son los que nos soportan sobre la bicicleta, por lo tanto no deben tener ningún tipo de juego; el asiento no debe moverse de arriba abajo ni girar sobre su base; si el asiento se inclina hacia adelante y/o hacia atrás debemos remplazar el broche del asiento (esa pieza rara que tiene un par de tuercas, escondida bajo el asiento). Por último, el manubrio no debe saltar ni vibrar al frenar y mucho menos trabarse al dar vuelta, si presenta alguno de estos problemas hay que acudir al mecánico.
