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Una mirada a un pueblo que sabe estar entre el mar y el desierto

Edita Semarnat Entre el mar y el desierto

Los concac ac han encontrado el sentido profundo y sagrado de la vida, está dentro de su cosmovisión mantener una relación armónica con la naturaleza, de ella toman sólo lo que necesitan.
Nancy Herrera

La diversidad biológica y cultural de este pueblo es descrita a través de la fotografía y la poesía plasmada en Entre el mar y el desierto, una obra que nació como parte de la celebración del año de los desiertos, la desertificación y el día mundial del medio ambiente.

Entre el mar y el desierto invita a reflexionar sobre la relación de los pueblos indígenas y la naturaleza. El libro está constituido bajo una mirada  ecológica antropológica y poética, señaló Esmeralda Loyden, coautora de este volumen, durante la presentación de su obra.

El libro fue editado por la Secretaria de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), y presentado por el secretario de esta dependencia, José Luis Luege Tamargo.

Los autores Esmeralda Loyden y Ricardo Garibay, nos presentan un testimonio de una comunidad, de alrededor de mil habitantes en donde el clima rebasa los 50 grados centígrados a la sombra.

“A pesar de ser un sitio de increíble belleza, es también una región de enorme dificultad para el sostenimiento de la vida”, sin embargo los concac ac  han desarrollado estrategias para sobrevivir y tienen muy clara su relación absolutamente dependiente del medio natural, por eso ellos toman sólo lo necesario para sobrevivir  y dejan intacto el resto para que permanezca, declaró Esmeralda Loyden.

Sumado a ello, un grupo de jóvenes de esta comunidad están monitoreando las tortugas del desierto ya que les encontraron un hongo en el caparazón y las quieren salvar de la extinción, señaló Ricardo Garibay.

En el libro  se mencionan la relevancia y belleza de especies en peligro de extinción como la tortuga laúd, puntualizó.

Fuente: Teorema

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