El organismo continental pidió a países americanos “pensar dos veces antes de flexibilizar el distanciamiento social”
Teorema Ambiental/Redacción
Ciudad de México, 3 de junio de 2020.— La Organización Panamericana de la Salud (OPS) advirtió al gobierno de México que si la tasa de transmisión del COVID-19 sigue creciendo, “es una señal para no reabrir la actividad económica” pues se aceleraría la propagación del virus sobre todo en las zonas más pobres.
Por ello, el organismo panamericano pidió a los países “pensar dos veces antes de flexibilizar el distanciamiento social” ya que una reactivación prematura provocaría la emergencia de casos graves en un volumen que superaría la capacidad hospitalaria incluso en naciones desarrolladas.
“En un país como México seguro que hay muchas diferencias y eso se tiene que tomar en cuenta, no hay una fórmula mágica pero si la transmisión todavía sigue creciendo eso es un indicativo de que no se debe empezar a abrir la actividad económica de manera inmediata porque sí puede significar que la transmisión se va a acelerar todavía más”, alertó el subdirector de la OPS, Jarbas Barbosa.
Agregó que aunque en el caso de México hay diferencias en cada estado, incluso “en áreas de alto número de casos” hay personas en las calles, por lo que el gobierno ha debido incrementar las medidas de apoyo para las personas en condiciones de pobreza y desigualdad social y económica, que no pueden aplicar las medidas de distanciamiento social.
El directivo de la OPS señaló que aunque el gobierno mexicano “está haciendo esfuerzo por ampliar el número de pruebas aplicadas e incluso habilitó más laboratorios incluso privados”, es necesario contar con un volumen todavía mayor de pruebas “para proteger al personal de salud y detectar los casos sospechosos y poder seguir el camino del virus para disminuir la transmisión”.
Por su parte, Carissa Etienne, directora de la OPS, alertó sobre los riegos de reactivar las actividades cuando la pandemia no se ha controlado y el comportamiento de la tasa de contagios no ha mostrado una disminución constante.
“Primero que piensen dos veces antes de flexibilizar el distanciamiento social porque sigue siendo nuestra mejor herramienta para contener el virus, muchos ahora piensan abrir, debemos ser cuidadosos, mi consejo es que no abran demasiado rápido o corren el riesgo de una reemergencia del COVID-19 que podría superar lo que hemos logrado.
“Nuestra recomendación siempre ha sido de probar, rastrear, tratar. El distanciamiento social desacelera la trasmisión de manera que los servicios de salud puedan probar los contactos, rastrear y aislar. Es una estrategia básica de muchos países que han logrado controlar la transmisión con éxito”, dijo.
También aconsejó no tomar decisiones en la oscuridad pues los países que ocultan o maquillan las cifras de contagio y defunciones, impiden un rastreo eficiente de la pandemia y con ello su control eficaz.
Ambos expertos señalaron que incluso “si la transmisión se está reduciendo también hay que resguardarse más” para garantizar que no haya un rebrote y los niveles de contagio se mantendrán a la baja hasta controlar la pandemia.
“Si empiezan un proceso planificado, cuidadoso de apertura, se tiene que monitorear porque al momento que identifique en una determinada área el crecimiento de nuevo, debe dar marcha atrás. No podemos dejar a la velocidad de transmisión seguir su curso natural porque eso va a probar incluso en países ricos que el número de casos graves va a ser mucho más que la capacidad que tienen los hospitales y se van a perder muchas vidas”, finalizó Barbosa.
