Ahora, los involucrados en este delito podrán encomendarse a él para evitar ser consignados por cometer un delito que se pretende sea considerado grave
Teorema Ambiental/Redacción
Ahora que se acerca el Día de la Candelaria, a algún personaje en México se le ocurrió vestir al Niño Dios como un vil ladrón de combustible, para que protegiera las “travesuras” de los huachicoleros, que han costado miles de millones de pesos al gobierno mexicano y provocaron una baja en el abasto de gasolinas para poder combatirlos.
En redes sociales circulan fotografías de este “niño”, ataviado con diversos accesorios, desde sillitas y collares hasta ropa interior y capas, dependiendo el uso, pero además esta figura cuenta con su manguera y un bidón, para extraer combustible.
De acuerdo con la información vertida en redes sociales, esta imagen es venerada mayormente en los municipios pertenecientes al Triángulo Rojo (Tecamachalco, Quecholac, Palmar de Bravo y Tepeaca) en la zona limítrofe entre Puebla y Veracruz, zonas en las que se tiene un mayor registro de tomas clandestinas (tres mil 161 según cifras de Pemex de 2005-2016).
Ahora, los involucrados en este delito podrán encomendarse a él para evitar ser consignados por cometer un delito que se pretende sea considerado grave, evitar incendios y proteger a sus familias.
