El edificio presenta un deterioro visible en los techos, las estructuras metálicas, plafones, acabados e instalaciones eléctricas, debido a que el sistema de impermeabilización colocado ya cumplió su vida útil
Teorema Ambiental/Redacción
El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) solicitó a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP) una partida urgente de 25 millones de pesos para impermeabilizar más de 12 mil metros cuadrados de azotea y detener el daño provocado por goteras, escurrimientos y humedad al interior del recinto museístico más importante del país.
De acuerdo con la solicitud 54 57 6, con registro en cartera 18 48 D000003, que el INAH hizo en este 2019 a la Unidad de Inversión de la SHCP, los recursos deben estar listos antes de la temporada de lluvias para atender los daños que presenta el recinto diseñado por el ingeniero Pedro Ramírez Vázquez.
El documento señala que el edificio presenta un deterioro visible en los techos, las estructuras metálicas, plafones, acabados e instalaciones eléctricas, debido a que el sistema de impermeabilización colocado ya cumplió su vida útil, además de que los sismos de 2017 generaron afectaciones en las losas de la azotea.
En las fotografías adjuntas por la Coordinación Nacional de Obras y Proyectos del INAH, se observan “las salas de exposiciones que fueron afectadas por filtraciones pluviales el verano pasado, que provocaron la colocación de plásticos y cubetas, así como el cierre de algunas áreas para evitar posibles daños más graves al patrimonio del recinto.
“A consecuencia de las filtraciones registradas con las lluvias del 2018 se tienen parcialmente cerradas diez salas de exposiciones y el área de bibliotecas, por el gran riesgo inminente del inmueble y la posibilidad de colapso del plafón por su humedecimiento”, señala la solicitud, pues de no atenderse, el museo deberá cerrar sus puertas con pérdidas de hasta 76 mil 65 pesos diarios.
El año pasado se inició la primera etapa de impermeabilización en 11 mil 927 metros cuadrados, pero no se concluyeron los trabajos por falta de presupuesto. Esta nueva solicitud de fondos será para cubrir el total de los más de 23 mil 750 metros cuadrados que mide la azotea del recinto.
Como medida alternativa, en ese momento se retiraron exposiciones, colocándose plástico con el fin de evitar afectaciones a la museografía y a las piezas en exhibición. Mientras que la Biblioteca fue reubicada.
Actualmente, la azotea del Museo cuenta con nueve sistemas de impermeabilización sobrepuestos, desde su apertura. El último es una membrana plástica colocada en 2003, cuya garantía era de diez años, pero actualmente presenta rasgaduras, perforaciones y desgastes.
