Aunque existe una ley que obliga a los municipios a reducir la producción en un 30% en los próximos cinco años, aún está sin reglamentar
BUENOS AIRES.— Los problemas derivados de la disposición final de residuos urbanos no sólo se dan en México, también en Argentina en donde la basura va en aumento y la capacidad de los rellenos sanitarios va alcanzando su tope.
Por ejemplo en el municipio la Provincia se mantienen habilitados los tres rellenos donde se vuelcan 15 mil toneladas diarias de basura de Capital. El predio del Camino del Buen Ayre, en San Martín, el de González Catán, en La Matanza y el de Punta Lara, en el partido de Ensenada.
En el basurero Norte III, con capacidad hasta 2012, se inició un proceso para reducir los gases dañinos para la capa de ozono: se convierte el gas metano en dióxido de carbono.
Pero a contramano de promesas oficiales y dictámenes judiciales, los otros dos complejos siguen funcionando aunque están saturados. El de Punta Lara debía quedar clausurado en 2007. Pero el cierre está condicionado a la habilitación otro centro para los residuos de La Plata, Berisso, Ensenada, Magdalena y Brandsen, aún incipiente.
Actualmente se intenta avanzar con la Ley 13.592, que obliga a los municipios a reducir la producción en un 30 por ciento en los próximos cinco años. Pero aún está sin reglamentar, por lo tanto, esos plazos no corren todavía. Mientras, la Provincia clausuró unos 25 basurales a cielo abierto en poco más de dos años.
Fuente: Diario Clarín
