El volumen de residuos peligros generados en México aumenta mucho más rápido que la infraestructura para manejarlos adecuadamente
México, DF.— El volumen de residuos peligrosos generados en México aumenta mucho más rápido que la infraestructura para manejarlos adecuadamente.
De acuerdo con datos del Sexto Informe de Gobierno del presidente Felipe Calderón, dicho volumen creció 130 por ciento entre 2006 y el proyectado para este año, al pasar de 838 mil a un millón 932 mil toneladas.
En tanto, el número de plantas para su procesamiento —incluyendo acopio, reciclaje, incineración, tratamiento y confinamiento— aumentó apenas 12 por ciento, para llegar a mil 316.
La cifra de generación, por lo demás, no incluye los recortes de la perforación petrolera y los desechos de los jales mineros.
Entre los residuos peligrosos destacan por su volumen los sólidos generados principalmente por la industria manufacturera, los líquidos de proceso, los aceites gastados, los lodos y los solventes.
El Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente urgió ayer a los gobiernos y la industria a tomar medidas para reducir los riesgos cada vez mayores que plantea la gestión no sostenible de los productos químicos.
En el reporte Perspectiva Mundial de los Productos Químicos —presentado en Ginebra, Nueva York, Nairobi y la ciudad de México— advirtió que sólo una parte mínima de las alrededor de 140 mil sustancias que se encuentran en el mercado hoy en día han sido sometidas a una evaluación exhaustiva sobre sus efectos en la salud humana y el medio ambiente.
“En los países en desarrollo y con economías emergentes, los productos de la industria química —tales como colorantes, detergentes y adhesivos, entre otros— están reemplazando rápidamente los productos tradicionales de origen vegetal o animal o a base de cerámica”, indicó.
De acuerdo con las estimaciones del PNUMA, la producción de químicos en México se incrementará 28 por ciento para 2020, tres puntos por arriba de Estados Unidos.
“Los riesgos se ven agravados porque se está arraigando cada vez más la transferencia de la producción, uso y eliminación de los productos químicos desde los países desarrollados a los países con economías emergentes, donde las garantías y normas suelen ser menos estrictas”, alerta el reporte.
En rueda de prensa en la cancillería, David Piper, director adjunto de la Subdivisión de Productos Químicos de la División de Tecnología, Industria y Economía del PNUMA, advirtió que a escala mundial se desconoce el destino de 70 por ciento de las sustancias químicas producidas industrialmente.
“No tenemos idea de adónde va el material, si termina en tiraderos de basura informales o si es utilizando para reciclado de forma incorrecta”, señaló.
Por su parte, Fernando Bejarano, director del Centro de Análisis y Acción sobre Tóxicos y sus Alternativas (CAATA), indicó que la implementación en el país de los convenios internacionales en la materia suscritos por México avanza de forma muy lenta.
“Por falta de voluntad política no se ha elevado el tema de las sustancias químicas a los planes nacionales de desarrollo. Es un tema que ha quedado marginado en este sexenio”, reprochó en entrevista.
En el caso del plaguicida Endusolfan, a cuya eliminación de uso se comprometió México en el marco del Convenio de Estocolmo, ejemplificó, la Secretaría de Salud aún no ha iniciado la cancelación de los registros correspondientes.
Fuente: El Golgo.info
