Ante la situación climática y el tic-tac del reloj de la Agenda 2030 de la ONU, algunas empresas, gobierno e instituciones privadas están llevando a cabo acciones para mejorar el medio ambiente, así como sus actividades de responsabilidad social hacia los recursos naturales, pero la tecnología también es un factor que colabora enormemente para ayudar a mejorar la calidad de vida en el planeta.
Las herramientas tecnológicas adecuadas permiten a menudo la actuación medioambiental y la mejora del rendimiento económico para disminuir el consumo de los recursos o de los desechos para que no se genere tanto impacto sobre el medio ambiente.