Empresas madereras se adentran cada vez más en la reserva forestal Balah e ignoran los derechos de los indígenas temiar
Ciudad de México.— En el norte de Malasia las montañas y valles están cubiertos por densas selvas. Aquí viven los temiar en armonía con la naturaleza. Pero en el estado de Kelantan se ha encendido una lucha por la tierra que amenaza el sustento de la población indígena, señaló la organización ambientalista Salva a la Selva.
Empresas madereras se adentran cada vez más en la reserva forestal Balah e ignoran los derechos de los indígenas temiar, adquiridos a lo largo de las generaciones que vienen poblando el lugar. Incluso el Estado desatiende los derechos tradicionales de los pueblos indígenas y otorga concesiones madereras. Más de la mitad del bosque de Kelantan ha sido destruido, agregó.
Cientos de hombres, mujeres y niños protestan juntos y solo dejan pasar a quienes habitan el área. En el bloqueo en Simpang Petei se evitó el transporte de 300 toneladas de madera ya talada.
El Estado reacciona con violencia: más de una vez se disolvieron las barricadas y hasta fueron quemadas, docenas de manifestantes fueron detenidos e incluso se habla de disparos a modo de advertencia. Durante el desalojo más reciente en enero, dos periodistas del canal News Asia se vieron involucrados.
El estudio Una visión para la industria maderera de Kelantan (An Insight to the Kelantan Timber Industry) muestra el ramo de la madera como susceptible de corrupción. Las concesiones son opacas. Las empresas madereras pueden y hacen lo que quieren, denunció Salva la Selva.
Fuente: Salva la Selva
