La Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) recaudará poco más de 12 millones de pesos con el lanzamiento del Pasaporte de la Conservación, con el que podrán visitarse 80 de las 250 áreas naturales protegidas que existen en el país. Ernesto Enkerlin Hoeflich, presidente de la Conanp, afirmó que el total de los fondos se invertirá en comunidades marginadas del país y en el desarrollo de proyectos ecoturísticos.
En ceremonia oficial realizada en el alcázar del castillo de Chapultepec, el funcionario indicó que la variedad de ecosistemas que ofrece México, como bosques, selvas, manglares, desiertos y zonas costeras y marinas, podrá ser visitada por turistas nacionales y extranjeros en un contexto «de preservación y protección de los recursos».
Por su parte, José Luis Luege Tamargo, secretario de Medio Ambiente y Recursos Naturales, insistió en que con este programa podrá garantizarse la sustentabilidad de estas áreas, ya que se creó «un instrumento de conservación que permitirá no sólo incrementar los recursos financieros que se les destinan, sino también promover la conservación de estos recursos con la participación de comunidades y visitantes».
Aseguró que el Pasaporte de la Conservación se promoverá tanto en México como en el extranjero, al tener apoyo de los gobiernos federal y estatales para su difusión, así como de la Secretaría de Turismo (Sectur) para distribuirlo en México y en algunos puntos del exterior donde haya representación de instituciones de Sectur y de promoción de la cultura mexicana.
Al respecto, Enkerlin Hoeflich aseguró que el pasaporte incluye un reglamento que especifica lo que el visitante podrá hacer y prohíbe las actividades que se consideran riesgosas para la preservación de las áreas naturales.
El pasaporte, con un costo de 250 pesos, será intransferible y tendrá vigencia de un año; integra una guía de todas las áreas naturales protegidas del país.
Se pretende consolidar un proyecto que asegure un incremento de dos millones de nuevos visitantes, para alcanzar la cifra de ocho millones al año en 2006.
Fuente: La Jornada
