Con 167 euro-generadores inyecta 230,000 voltios a la CFE. La compañía española Bii HIoxo de gas natural fenosa (GNF) construyó el parque eólico más grande en el istmo de Tehuantepec en 6,200 hectáreas de tierras comunales del lugar
Milagros Díaz L.
Uno de los parques eólicos más grandes de México, ya está funcionando. Un avance en el desarrollo de las energías renovables sin duda alguna.
El pasado 22 de enero, se anunció en diversos medios el inició de la operación de uno de los 15 primeros aerogeneradores de electricidad construidos y administrados por empresas privadas en México, autorizados en el estado de Oaxaca.
Esto como parte de un gran proyecto que pronto estará en total operación, entre los que se encuentran: la Venta y la Venta II de la Comisión Federal de Electricidad (CFE); Parques Ecológicos de México; Eurus, Fase I y II de Cemex/Acciona; Bii Nee Stripa I de Iberdrola; La Mata-La Ventosa de Eléctrica del Valle de México, filial de Electricité de France; Fuerza Eólica del Istmo I y II, de Peñoles; La Venta III de Iberdrola y CFE; Oaxaca II, III y IV de Acciona y CFE; Oaxaca I, de CFE y Eyra; Bii Nee Stripa II de Gamesa/Enel; Piedra Larga Fase I de Renovalia/Demex y Bi Nee Stripa III de Gamesa y Enel.
El desarrollo científico en la materia presenta un nuevo reto, observar el desarrollo, la evolución y las consecuencias contempladas y las colaterales de la implementación de esta alternativa energética denominada “energía limpia”. Una labor que colocaría a México en los primeros planos mundiales de apertura a las energías renovables.
Para que esto sea posible es necesario establecer que en la búsqueda del ahorro de energía mediante estas alternativas se contemple el beneficio y desarrollo, en todos los sentidos, de las poblaciones en las que se establecen, de manera simultánea.
Sin duda alguna, ha sido indispensable la participación de la inversión extranjera y la implementación e industrialización de estas alternativas que vienen del exterior. Iberdrola, compañía española, forma parte de estos proyectos de instalación de 15 parques eólicos autorizados en el estado de Oaxaca, donde prevalece la población de origen indígena. Punto fundamental de consideración a favor de los pobladores y no como un pretexto.
El istmo de Tehuantepec fue seleccionado debido a que se considera “una de las zonas con más viento en el mundo”. Con 167 euro-generadores inyecta 230 mil voltios a la CFE. La compañía española Bii HIoxo de gas natural fenosa (GNF) construyó el parque eólico más grande en el istmo de Tehuantepec en seis mil 200 hectáreas de tierras comunales del lugar.
Las leyes nacionales con gran apertura a la inversión extranjera deben proteger a la naturaleza humana, como parte del tema del cuidado ambiental. Si bien para la construcción de este parque se considera y observa el comportamiento de tres rutas migratorias de aves y se piensa que evitará la emisión a la atmósfera de unas 560 mil toneladas anuales de dióxido de carbono (C02), no se puede dejar de lado el tema más importante que es el humano.
El desarrollo de la energía eólica es pieza clave para la transición energética, sin embargo “la construcción de esta planta se dio a pesar de la oposición de los pobladores del istmo. Quienes aseguraron que los trabajos se realizaron con engaños y sin consulta previa a los pueblos”. (http://www.evwind.com/2013/08/12/eolica-en-mexico-desarrollo-eolico-en-oaxaca-provoca-debate/)
“Los parques eólicos que se están desarrollando están generando consecuencias sociales negativas que sobrepasan los posibles beneficios que éstos generan, al desconocer los derechos humanos de las comunidades campesinas e indígenas que habitan la zona (zapotecos y jijots)”, advirtieron grupos ambientalistas, reunidos los pasados 26, 27 y 28 de julio en el Seminario Internacional Megaproyectos de Energía y Territorios Indígenas, efectuado en Juchitán, Oaxaca.
Teorema Ambiental
