Desarrollo Urbano

Otorgan bono de carbono por logros del Metrobús

El Banco Mundial entregó a la administración capitalina un primer bono de carbono por un millón 780 mil pesos, al lograr con un sistema de transporte “limpio”, como el Metrobús de Insurgentes, una disminución de 29,177 toneladas de bióxido de carbono a la atmósfera, que contribuye a mitigar el efecto invernadero y el calentamiento climático, informó el director del organismo, Guillermo Calderón Aguilera.

A dos años de iniciar operaciones —19 de junio de 2005— no sólo se ha convertido en el primer sistema de transporte descentralizado en el mundo que recibe este respaldo financiero en el contexto del Mecanismo de Desarrollo Limpio de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), sino que ha logrado movilizar a 145 millones de pasajeros, casi 275 mil en promedio en día hábil.

Además de reducir 35 por ciento en el tiempo de recorrido de los usuarios equivalente a un ahorro de 24 millones de horas-hombre y más de 12 millones de dólares, sin dejar de lado que también ha disminuido en 25 por ciento el número de accidentes viales y permitido la incorporación de 27 mil personas que “abandonaron” su automóvil, de manera definitiva, para trasladarse en Metrobús a su destino.

A todo ello se suma la modificación de la imagen y regulación de la circulación en la avenida Insurgentes, donde la gente “dejó de sufrir con los ascensos en segundo o tercer carril, la falta de cortesía de los conductores y la alta velocidad de las unidades por ganar pasaje, que dejaron los microbuses” aunque, reconoció, todavía hay gente que se resiste a que se multiplique este servicio en otros puntos de la ciudad.

Con 144 mantas colocadas principalmente en las estaciones ubicadas entre la Glorieta Insurgentes y Nápoles, donde se destacan los logros obtenidos, el sistema celebra su segundo aniversario, precisando que este primer bono, de los 10 comprometidos, se destinarán a la construcción de nuevas ciclovías, paraderos de bicicletas y proyectos de nuevos corredores, precisó.

Reconoció que ni siquiera el Transmilenio, pionero en corredores confinados, cuenta con un respaldo de este tipo, debido a que carece de un sistema de medición de partículas, como el que tiene la ciudad de México, con lo cual está asegurado el apoyo económico durante los próximos nueve años, pues la institución financiera mundial ya nos entregó el correspondiente a enero-diciembre de 2006.

Se trata, destacó, de la primera operación de financiamiento con bonos de carbono en el sector, donde se estima una reducción total de 354 mil toneladas, la cual será verificada por la empresa holandesa DND, organismo internacional certificado, mientras siguen los trabajos de pavimentación en la zona norte, para mejorar la prestación del servicio por parte de 98 unidades, de las cuales 86 se mantienen en circulación.

Y manteniendo tres circuitos en horas de máxima demanda de Indios Verdes a Doctor Gálvez, Indios Verdes-Insurgentes y Glorieta Insurgentes a Colonia del Valle, con un total de 62 unidades por hora, menos de un minuto de intervalo entre ellos y reduciendo su saturación, dijo, al mencionar que el proyecto de colocar cristal o estatuas en algunas estaciones se quedará como proyecto. Únicamente se mantendrá la de Fonsinelli en Polyforum, concluyó.

Fuente: La Jornada

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