Pese a que el Invea ha clausurado 938 vallas irregulares, el problema continúa, ocasionando contaminación visual y accidentes vehiculares, principalmente en zonas como la CDMX
Se calcula que en México hay alrededor 30 mil vallas publicitarias, sin embargo solo el 10 por ciento están en regla, es decir que cuentan con licencia, Permiso Administrativo Temporal Revocable (PATR) o autorización temporal para ser colocadas, mientras que en la Ciudad de México se estima que existen aproximadamente cuatro mil vallas y solo la mitad cuenta con permiso, según datos de la Fundación por el Rescate y Recuperación del Paisaje Urbano (FRRPU).
Jorge Carlos Negrete Vázquez, presidente de la FRRPU, asegura que la industria de la publicidad exterior se ha convertido en un negocio redituable, como ejemplo la Ciudad de México, donde solo el mercado de las vallas publicitarias en la capital del país deja ganancias aproximadamente de 80 millones de pesos al año y las principales empresas que lo lideran son Rentable y Grupo Vallas.
El problema radica en que debería de haber mínimo 625 licencias para la colocación de vallas publicitarias de manera regular pero solo se presentaron 233 solicitudes, de las cuales únicamente el 3.36 por ciento obtuvieron el permiso, ya que se estima que por cada espacio público en vías primarias se pueden colocar hasta ocho anuncios de este tipo.
Según datos de la Secretaria de Desarrollo Urbano y de Vivienda de la Ciudad de México (Seduvi), el último año se autorizaron alrededor de 60 licencias para colocar anuncios publicitarios, esta cifra triplica a las concedidas en 2015 donde solo se entregaron 21 de las 233 solicitudes de permisos que se ingresaron.
Negrete Vázquez señaló que las cifras emitidas por la Seduvi evidencian una grave problemática porque indican que hay empresas que están operando fuera de la ley, ya que cada licencia otorgada es para cinco vallas publicitarias, es decir, si hay 60 licencias deberían existir 300 anuncios de este tipo, sin embargo, existen cuatro mil, lo que significa que solo el 7.5 por ciento de los anuncios son regulares en la capital, ocasionando una descontrolada contaminación visual al invadir espacios públicos, además de ser un indicador distractor a los conductores, ya que se les atribuye el 16 por ciento de los accidentes viales generados en la capital del país.
