Para poder procesar el kilo de desperdicios que genera cada habitante de la ciudad de México, el Departamento del Distrito Federal cuenta con la siguiente infraestructura: 13 estaciones de transferencia, tres plantas de selección, un sitio de disposición final, una planta de composteo.
Según la Secretaría de Obras y Servicios de la Dirección General de Servicios Urbanos, la capital del país genera 12 mil toneladas diarias de desperdicios, de los cuales 50 por ciento es material orgánico, 39 por ciento es potencialmente reciclable y 16 por ciento lo conforman otro tipo de residuos.
A decir de la secretaría, es urgente construir una nueva planta que tenga una capacidad de procesamiento de 1,250 toneladas por día y fortalecer las acciones de separación desde la fuente de generación. En este sentido, la Dirección General de Servicios Urbanos informó que el Programa para la Separación de Residuos Sólidos 2002, consistió en separar cáscara de frutas y verduras, así como desechos de jardines.
También se separó de manera exitosa papel, cartón, plástico, vidrio, metal, tela y aparatos inservibles, así como pañales, pañuelos desechables, toallas sanitarias, material de curación, pilas y colillas de cigarro. En los programas participaron 61 sitios, entre los que destacan edificios administrativos (20 por ciento), casas de asistencia social (8 por ciento), instituciones educativas y el Museo de Historia Nacional (30 por ciento). Los edificios administrativos generaron cerca de 1,080 toneladas de residuos en el año, lo que representó 49 por ciento del total, el Museo de Historia Natural y las instituciones educativas 562 toneladas (26 por ciento) y 407 toneladas por parte de las casas de asistencia social.
Estructura operativa
El Sistema de Administración Ambiental está coordinado por la Secretaría del Medio Ambiente del Distrito Federal. En los programas elaborados por la dependencia oficial han participado 14,381 personas, quienes generaron 745 toneladas en el año.
Un programa muy importante fue el de Escuela Limpia, que se coordinó entre las delegaciones y la Secretaría de Educación Pública. Su objetivo consistió en fomentar dentro de la población escolar una cultura de cuidado y preservación del medio ambiente, mediante la clasificación de los residuos sólidos que se generan en los centros escolares.
En la Cruzada por un México Limpio participaron la Secretaría del Medio Ambiente, el Centro de Capacitación para el Desarrollo Sustentable, la Secretaría de Educación Pública, el Gobierno del Distrito Federal y el Papalote Museo del Niño. El programa también se concentró en la separación de residuos sólidos en cerca de 5,200 escuelas. El proyecto piloto arrancó en la Delegación Iztapalapa en 300 escuelas.
Reciclable por Naturaleza es el nombre de otro programa realizado en convenio con la Junior League de la Ciudad de México IAP, y el objetivo consistió en recuperar los envases de cartón multipak para su posterior reciclado. Participaron en el programa el Gobierno del Distrito Federal, Tetrapak, Florida 7, Alpura, Comercial Mexicana, Gigante, Wal-Mart, Superama e ISSSTE.
El volumen recolectado fue de 5.5 toneladas promedio por mes, en 110 sitios, 58 escuelas y 52 centros comerciales.
Aprovechar el pet
El tereftalato de polietileno (mejor conocido como PET), entra en los planes del gobierno capitalino para ser reciclado, con el objetivo principal de reducir su disposición inadecuada. En este proyecto participan la Secretaría del Medio Ambiente, la Secretaría de Obras y Servicios, Ecología y Compromiso Empresarial (Ecoce), la Asociación para Promover el Reciclado del PET, AC (Aprepet) y la Asociación Nacional de Productores de Refrescos y Aguas Carbonatadas.
Las acciones propuestas consisten en elaborar una valorización y considerar una tasa de recuperación, incrementar los volúmenes de acopio, abrir un macrocentro en la Delegación Gustavo A. Madero y la futura instalación de otros cinco macrocentros y cuatro centros móviles.
El proyecto para el tratamiento de neumáticos usados es relevante, debido a que actualmente se desechan cerca de un millón de neumáticos al año y no existe una normatividad al respecto. Las autoridades capitalinas se han reunido con la Asociación de Fabricantes y Distribuidores de Neumáticos, con el propósito de instalar una planta de reciclaje, promover el acopio y transporte de los neumáticos, buscar tratamientos adecuados y sin riesgo para la población. La recomendación ha consistido en incinerar los materiales en las plantas cementeras.
Pasos para avanzar más rápido
En términos muy amplios, los residuos se pueden clasificar en peligrosos (industriales, especiales y controlados), residuos de alto volumen y residuos domésticos (municipales o urbanos).
Para enfrentar con éxito su tratamiento y disposición final, es prioritario fortalecer la capacidad de gestión institucional, modernizar los instrumentos de gestión ambiental, promover el desarrollo de infraestructura ambiental, ajustar el marco jurídico y favorecer la integración de incentivos económicos.
Aunado a lo anterior, es fundamental fortalecer la investigación y el desarrollo tecnológico, consolidar un Sistema de Información Ambiental, estimular el cumplimiento de la normatividad ambiental, fortalecer la capacidad de gestión local y crear conciencia sobre la importancia ambiental del equilibrio ecológico.
La tarea pendiente para el presente año bien puede resumirse en la necesidad de crear un inventario real y dinámico de residuos peligrosos, un inventario de sitios contaminados prioritarios y un plan de remediación.
De igual manera, se necesita elaborar un sistema de calidad en todos los trámites de residuos peligrosos, suelos contaminados y riesgo, apoyar la promoción de infraestructura para el manejo de residuos peligrosos y apoyo a la Cruzada por un México Limpio. Sólo de esta manera se podrá hacer frente a la generación anual de residuos peligrosos, la cual actualmente es de aproximadamente ocho millones de toneladas.
