Contaminación

Investigador señala presencia de plomo en cloro comercial

Es imposible dejar de utilizar el cloro, pero sí hay que realizar una campaña de correcto uso de éste, aseguró el investigador

Puebla.— Después de una ardua investigación, Isidoro Lezama Maximiliano, alumno del noveno cuatrimestre de la Facultad de Ciencias Químicas de la BUAP, comprobó la existencia de plomo en el cloro comercial.

Para comprobar su teoría, generó varias pruebas a distintas marcas comerciales de cloro, en las que, además, encontró otros nueve metales pesados y corroboró las especificaciones de las etiquetas en cuanto a densidad, alcalinidad y porcentaje de cloro.

En este análisis, que efectuó en colaboración con su compañera Verónica Segura Pérez, se registró que los niveles de la densidad están arriba de 11, por lo que algunos tienen una alcalinidad sumamente alta.

Refirió que es imposible que la comunidad deje de utilizar cloro, por lo que se pronunció a favor de una campaña para indicar las medidas adecuadas de uso, por ejemplo utilizar guantes al emplear este producto, ya que con el paso de los años una persona puede sufrir artritis.

El estudiante indicó que la producción de cloro ha tenido un alto impacto desde la guerra industrial, “incluso las amas de casa lo utilizan como desinfectante para comida o eliminar cualquier microorganismo patógeno”, señaló Lezama Maximiliano.

Por su amplio consumo, diversas empresas se dedican a comercializarlo, pero “con tal de producir un buen lote de dicha sustancia, no se llevan a cabo las normativas de bajar el pH”, por lo que aparecen residuos de plomo.

Explicó que el plomo es un metal que se conoce desde 400 años antes de Cristo en Egipto, desde entonces se le han adjudicado diversas enfermedades, una de ellas es la intoxicación de plomo en sangre llamada plumbismo o saturnismo. “Con el paso del tiempo, este tipo de contaminación, tanto en el ser humano como en el medio ambiente, ha aumentado. En estudios realizados en Groenlandia en los glaciares de hielo, se demostró que un gramo de hielo contenía uno por diez o nueve gramos de plomo, 200 años más tarde aumentó 20 veces”, indicó.

Fuente: Sin Embargo

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