Colaboraciones

La crisis del agua afrenta a la ciencia brasileña

Uno de los primeros en predecir la escasez de agua en el mundo fue Augusto Ruschi

Por André Trigueiro

crisis-brasilNo fue por falta de aviso. Más allá de su capital natural inconmensurable, Brasil construyó a través del tiempo un sólido acervo de conocimientos científicos sobre sus biomas, ecosistemas y cuencas hidrográficas.

Personas de la talla de José Lutzenberger, Augusto Ruschi y Aziz Ab’Saber (entre muchos otros que abrieron importantes nuevos horizontes de la investigación científica) revelaron que la naturaleza se comporta como un sistema interconectado sofisticado, donde ciertos tipos de intervención, aparentemente inofensivos, pueden causar estragos gigantescos.

Si no fuera por el genio y el respeto que impusieron a partir de sus trabajos científicos, habrían sido destruidos por los poderosos de la época.

No fueron pocos los políticos sin escrúpulos y empresarios codiciosos que han intentado a toda costa “deconstruir” (para usar una palabra de moda) sus reputaciones. Dejaron un importante legado que debería inspirar una nueva ética sobre el modelo de desarrollo, especialmente un mayor cuidado en cómo se diseñan e implementan ciertas políticas públicas.

Por lo tanto, es interesante imaginar ¿qué dirían hoy Lutz, Ruschi y Ab’Saber sobre la crisis del agua sin precedentes en la historia de Brasil?

En 1980, al publicar el libro con el sugerente título ¿El fin del futuro?, José Lutzenberger denunció que “la pérdida de la cubierta vegetal protectora, además de significar la desaparición de los hábitats esenciales para la supervivencia de la fauna y de las especies vegetales más especializadas y preciosas, provoca el desequilibrio hídrico de los cuerpos de agua (…) Estamos preparando para nuestro país la misma suerte que el cordón subsahariano”.

Uno de los primeros en predecir la escasez de agua en el mundo, Augusto Ruschi, denunció en sucesivas advertencias, como en este texto de 1986, los impactos causados por la deforestación en el flujo de agua de los ríos, especialmente en la Amazonia:

“Hace 35 años, escribí que estábamos en camino a construir en el Amazonas el segundo desierto más grande del mundo. Hoy la p

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