La unidad móvil de monitoreo atmosférico recientemente donada por el consorcio japonés Isuzu Motors de México al Instituto Nacional de Ecología (INE), será utilizada para monitorear las ciudades fronterizas más contaminadas que no cuenten con redes de registro de calidad del aire.
Nancy Herrera
El vehículo está acondicionado con la más alta tecnología para el análisis y detección de sustancias contaminantes del aire como son partículas suspendidas (PM10), bióxido de carbono (C02), óxido de nitrógeno (NOx), bióxido de azufre (SO2) y ozono.
La unidad será utilizada principalmente en las ciudades fronterizas norte del país, debido a la contaminación del aire que producen los vehículos “chatarra” provenientes de Estados Unidos, así como la concentración de transporte de carga en esta zona.
Autoridades del INE estiman que cada auto “chatarra” que ingresa al país contamina el equi-valente a unas 100 unidades nuevas, ya que muchos de estos vehículos ya han terminado su vida útil y son trasladados a México donde los reparan y se integran al parque vehicular.
Actualmente tan sólo 25 ciudades de todo el país cuentan con alguna capacidad de monitoreo de la calidad del aire, lo que re-presenta que solamente un tercio de la población cuenta con información confiable de la calidad atmosférica de la región donde habitan.
La unidad móvil de monitoreo será operada por el Centro Na-cional de Investigación y Capa-citación Ambiental (Cenica), institución fundada en 1975 por el INE con apoyo de la Agencia de Cooperación Internacional de Japón, cuyo objetivo es generar información que apoye a la toma de decisiones en temas de contaminación atmosférica y residuos.
Además, esta unidad ayudará en el registro de las emisiones en los corredores industriales para verificar los avances de programas de reducción de contaminantes de compañías como Petróleos Mexicanos y la Comisión Federal de Electricidad.
