De acuerdo con el Servicio Internacional para la Adquisición de las Aplicaciones Agrobiotecnológicas (ISAAA), la siembra de cultivos biotecnológicos como el algodón y la soya, en México, han generado, desde 1996, ingresos a los productores por 120 millones de dólares.
Durante 2011 se alcanzó un promedio de 175 mil hectáreas de estos cultivos, lo que representó un incremento de 146 por ciento en comparación con 2010, aseguró el organismo internacional.
Sin embargo, en el caso de otros cultivos como el maíz, aún queda un gran segmento de oportunidad que se deberá aprovechar si se quiere seguir siendo competitivo y garantizar la producción de alimentos que demanda su población.
Agregó que se importa alrededor de diez millones de toneladas de maíz anualmente, a un costo promedio de hasta dos mil 500 millones de dólares, monto que podría quedarse en territorio nacional y aprovecharse para apoyar el desarrollo del campo mexicano.
En tanto, Alejandro Monteagudo, director de AgroBio, aseguró que los permisos para la siembra de maíz transgénico de forma comercial podrían concretarse para finales de este año, por lo que probablemente en 2013 se estaría entrando de lleno en esta fase.
En 2011, alrededor del mundo, se plantaron 12 millones de hectáreas adicionales de cultivos biotecnológicos, la mayoría de ellas en países de América Latina, como Brasil y Argentina.
Según datos del ISAAA, el año pasado, 16.7 millones de agricultores en 29 países, entre ellos 19 países en vías de desarrollo y diez países industrializados, sembraron 160 millones de hectáreas, lo que representa un incremento de 94 veces en el número de hectáreas sembradas desde 1996.
En los países emergentes, agregó James, la adopción fue dos veces mayor y el doble de rápida.
Fuente: La Crónica de Hoy
