Los drones ayudan a observar las características de los eventos explosivos y delimitar la dirección de flujos de lava
Colima.— Un equipo de especialistas realiza actividades de monitoreo al Volcán de Fuego de Colima con drones —vehículos aéreos no tripulados— construidos con materiales especiales y equipos de última generación.
Los drones permiten a los científicos del Observatorio Vulcanológico de la Universidad de Colima (Ucol) observar las características de los eventos explosivos, delimitar la dirección de flujos de lava, flujos piroclásticos y lluvias de ceniza.
Son muchos los retos técnicos que se afrontan para construir un modelo de dron con prestaciones muy superiores a los disponibles en el mercado, capaz de elevarse a cuatro mil metros de altura sobre el nivel del mar y con una autonomía de vuelo de hasta 60 minutos, señaló Mauricio Bretón González, doctor en sismicidad y vulcanismo por la Universidad de Granada, España, y miembro nivel I del Sistema Nacional de Investigadores (SNI).
Los drones que se usan en la vigilancia volcánica permiten ver las transformaciones del volcán en todo momento y son instrumento de prevención que permiten dar seguimiento al crecimiento de domos, flujos de lava y de lahares.
Nosotros tratamos de mitigar el riesgo y seguimos trabajando en el monitoreo volcánico; sin embargo, un dron te permite otros usos relacionados con fenómenos naturales o antropogénicos: ver el desbordamiento de un río; comunidades atrapadas en caso de desastre como en deslizamientos, sismos, accidentes químicos, entre otros; es decir, el dron sirve para el monitoreo volcánico, pero tiene otros usos, por lo que esperamos que este tipo de instrumentación beneficie a la sociedad.
Hoy en día el uso de drones en distintos campos es una realidad y estamos seguros que serán parte de nuestras vidas en un futuro muy cercano.