Irma ha sido descrita por meteorólogos como un huracán “potencialmente catastrófico” de categoría 5, la máxima de la escala Saffir-Simpson de intensidad de huracanes
Para muchos, el huracán Irma es una de las tormentas más poderosas que ha azotado al Atlántico en un siglo, ocasionando zonas de devastación en distintas zonas del caribe, y lluvias intensas en Estados Unidos.
Hasta el momento, la catástrofe más acentuada fue en Barbuda, donde el primer ministro de Antigua y Barbuda, Gaston Browne, dijo que el huracán destruyó el 90 por ciento de las estructuras en la isla.
“Esto es un desastre nacional”, dijo Browne, además de estimar en 150 millones de dólares la valuación preliminar de los daños. Aún se desconoce si hubo víctimas mortales o de datos sobre personas heridas.
En tanto, de acuerdo con el ministro del Interior francés, Gerard Collomb, al menos 10 personas murieron y 23 resultaron heridas en los territorios franceses de las islas de San Martín y San Bartolomé, sin embargo el número de fallecidos en dichas islas podría ser más elevado porque los equipos de rescate no terminaron de inspeccionar.
También se reportaron graves daños en San Martín, una isla que está dividida bajo control de Francia y Holanda. Francia envió agua y alimentos de emergencia tanto a San Martín como a San Bartolomé, en donde el paso de Irma dejó casas sin techo y destruyó el sistema eléctrico. Infantes de Marina holandeses que se trasladaron a San Martín y otras dos islas bajo control holandés que fueron azotadas por Irma, señalaron que los daños son extensos pero no hay reporte de lesionados o heridos.
El Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos predijo que Irma mantendría la categoría 4 o 5 durante uno o dos días, en un rumbo que la llevaría justo al norte de República Dominicana y Haití el jueves, cerca de Turks & Caicos y zonas de Bahamas por la noche y en los alrededores de Cuba en la noche del viernes al sábado. Después es probable que se dirija al norte, hacia Florida.
