Cambio climático

Conoce el Centro Mundial de Datos sobre Gases Invernadero

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Ciudad de México.— El Centro Mundial de Datos sobre Gases Invernadero se estableció en la Agencia Meteorológica de Japón (JMA) en octubre de 1990 y recoge y distribuye datos sobre las relaciones de mezcla de efecto invernadero (CO2, CH4, CFCs, N2O, etc.) y relación reactiva (O3, CO, NOx, SO2, COV, etc.) de gases en la atmósfera y el océano.

También se registran a CMDGEI parámetros meteorológicos medidos al mismo tiempo.

Los proveedores de datos presentan sus datos en internet de acuerdo con la revisión de la Guía de Envío y Difusión de Datos CMDGEI (VAG Informe N° 188). A partir de marzo de 2012, 325 estaciones de 65 países presentaron datos de observación de 111 especies de efecto invernadero y gases similares a la CMDGEI. El CMDGEI publica periódicamente el “OMM CMDGEI DVD” y “Resumen de la OMM CMDGEI de datos”.

En el marco del programa de la Vigilancia de la Atmósfera Global de la OMM se coordinan las observaciones sistemáticas y el análisis de los gases de efecto invernadero y de otros elementos en traza. Cincuenta y un países han comunicado los datos con los que se ha elaborado el Boletín sobre los gases de efecto invernadero. Los datos de medición comunicados por los países son archivados y distribuidos por el Centro Mundial de Datos sobre Gases de Efecto Invernadero (CMDGEI), ubicado en el Servicio Meteorológico de Japón.

Una de las formas más naturales y eficaces en la captura y almacenamiento de dióxido de carbono (CO2) es plantando árboles. Los árboles, a través de la fotosíntesis, capturan el CO2 de la atmósfera. Son capaces de absorber una gran cantidad de CO2 a lo largo de su vida, pero no todos los árboles poseen el mismo potencial de absorción. La especie, el tamaño o su distribución en el bosque junto con otras especies, son factores que hacen que varíe su capacidad de absorción de CO2.

Listado de árboles por orden de absorción de CO2
Pino carrasco (Pinus halepensis)
Pino piñonero (Pinus pinea)
Melia (Melia azederach)
Encina (Quercus ilex)
Alcornoque (Quercus suber)
Acacia de tres espinas (Gleditsia triacanthos)
Jacaranda (Jacaranda ovalifolia)
Olmo (Ulmus minor)
Braquiquito blanco (Brachychiton populneum)
Naranjo (Citrus aurantium)
Olivo (Olea europae)
Álamo (Populus alba)
Plátano (Platanus x hispanica)
Ciprés (Cupresus sempervirens)
Laurel (Laurus noviles)
Árbol del amor (Cercis siliquastrum)
Ciruelo japonés (Prunus cerasifera)
Catalpa (Catalpa bignonoides)

Que unos árboles fijen más CO2 que otros no es el único factor que debe tomarse en cuenta a la hora de plantar un árbol, ya que la multiplicidad de especies en nuestros bosques es beneficiosa para todos en términos de biodiversidad y como parte del ciclo de vida de otras especies arbóreas y animales. Anímate a participar en nuestro proyecto plantando alguno de estos árboles.

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