Cambio climático

Cambio climático pone en peligro playas de Cancún y Manzanillo

El informe preliminar Cambio climático, migración y seguridad, preparado por el Instituto Real de Servicios Unidos, alerta por los riesgos en poblaciones costeras

Ciudad de México.— En un futuro más o menos próximo, el cambio climático tendrá impactos severos en las poblaciones costeras de México, donde se encuentran 60 de las 70 poblaciones más importantes del país, advierte un estudio.

En el informe preliminar titulado Cambio climático, migración y seguridad, preparado por Elizabeth Deheza, del Instituto Real de Servicios Unidos (RUSI, por sus siglas en inglés), se detallan las zonas costeras en riesgo por el aumento en el nivel del mar, lo que puede ser catastrófico.

La mayor parte de las regiones costeras de México enfrentan riesgos extremos ante el cambio climático. El aumento en el nivel del mar puede dejar inhabitables las costas, dañar o destruir la infraestructura.

Durante el proceso, las autoridades pueden ser rebasadas en el límite de su capacidad para atender los problemas, y por ello el conjunto de factores puede contribuir a incrementar los flujos migratorios y los desplazamientos masivos de personas.

Algunas de las localidades en riesgo son: Cancún, Veracruz, Ixtapa y Cozumel.

“El Golfo de México es, en general, una preocupación para el país, ya que contiene ocho de los diez puertos pesqueros más importantes, así como tres de los cinco puertos industriales.”

En la costa del Pacífico, el puerto de Manzanillo, el de mayor tráfico en México, enfrentaría las mayores pérdidas económicas, en la medida que se vuelva más difícil acceder y navegar en él.

Actualmente, ese puerto recibe 18 millones de toneladas de mercancía por año.

El estudio señala también que el aumento en el nivel del mar derivado del cambio climático podría exponer las vulnerabilidades en la estabilidad de las plataformas petroleras, con potenciales resultados catastróficos para el medio ambiente.

Ante tal panorama, se hace urgente trabajar de manera decidida en contrarrestar el cambio climático, al tiempo de invertir en infraestructura que ayude a atemperar estos escenarios, que generarían una enorme presión económica y social al país.

Fuente: El Universal

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