BERLÍN.— Un diverso grupo de líderes mundiales, formado por ex jefes de Estado y de gobierno y líderes procedentes del mundo empresarial, el gobierno y la sociedad civil de más de 20 países, ha divulgado hoy un exhaustivo marco de acción global para hacer frente al cambio climático. Liderazgo Global para la Acción Climática (LGAC) es una iniciativa conjunta del Club de Madrid y la Fundación Naciones Unidas.
El informe de LGAC destaca 11 recomendaciones para futuras negociaciones, con el objetivo de reducir para el año 2050 las emisiones globales de dióxido de carbono a 60 por ciento de los niveles que había en 1990, de forma que el calentamiento del planeta no sobrepase los 2 o 2.5 grados centígrados. Las recomendaciones las han hecho públicas esta mañana los copresidentes de LGAC, el ex presidente de Chile Ricardo Lagos, y el ex senador estadounidense Timothy E. Wirth, en el Diálogo de Gleneagles sobre Cambio Climático del G-8+5, celebrado los días 10 y 11 de septiembre de 2007.
“Creemos que nuestras recomendaciones representan los mejores y más efectivos pasos que se pueden tomar a escala global para afrontar adecuadamente el cambio climático. Como uno de los retos más acuciantes y difíciles de la humanidad, la crisis climática no se puede resolver de manera efectiva si estamos limitados por lo políticamente correcto”, comentó Ricardo Lagos.
“Por tanto, recomendamos un acuerdo exhaustivo que incluya a todos los países, a todos los sectores y a todas las fuentes y modelos de emisiones, la mitigación y la adaptación. Estamos de acuerdo en que son los países desarrollados los que deben dirigir de manera decisiva los esfuerzos por la reducción global de las emisiones. Y admitimos que no todos los países en desarrollo son iguales —algunos están industrializándose rápidamente y otros están menos desarrollados— y el compromiso de esos países debería ser diferente”, añadió Lagos.
“Las recomendaciones de LGAC reconocen que el cambio climático presenta una gran oportunidad para favorecer el desarrollo de tecnologías de bajo coste, bajas en carbono, que colaborarán en la creación de nuevos empleos y contribuirán al crecimiento económico”, comentó Wirth.
“También proponemos la movilización de los recursos públicos y privados para apoyar las medidas de adaptación, evitar la deforestación y poner en marcha la energía limpia en los países en desarrollo”, agregó.
El marco del LGAC propone cuatro cuestiones a tratar en próximas negociaciones:
Mitigación – Objetivos, calendario, mecanismos de mercado
• Para reducir colectivamente para el año 2050 las emisiones globales hasta al menos 60 por ciento de los niveles de 1990 los países desarrollados, entre ellos Estados Unidos, deberían adoptar objetivos efectivos y calendarios para las reducciones. Como primer paso, esto podría incluir un compromiso para reducir las emisiones un 30 por ciento hacia 2020. Los países de industrialización rápida, como China y la India, deberían comprometerse a reducir su intensidad energética un 30 por ciento hacia 2020 (un ritmo de 4 por ciento al año) y llegar a un acuerdo para reducir las emisiones posteriormente. Otros países en desarrollo deberían comprometerse a adquirir objetivos diferenciados de intensidad energética en función de sus responsabilidades y su capacidad.
• Debería establecerse un precio para el carbono, mediante los impuestos o el comercio. El mecanismo preferente es un sistema de impuestos sobre el carbono concertado y universal.
Adaptación
• Es necesario afrontar la adaptación a los efectos del cambio climático, considerado como parte del desarrollo sostenible y las estrategias para aliviar la pobreza. Habría que establecer centros para la adaptación en agricultura, especialmente en África.
Desarrollo tecnológico y cooperación
• Debería considerarse la formación de un grupo consultivo sobre investigación en energías limpias, con el fin de promover la colaboración para la “revolución tecnológica limpia”.
• La reciente reducción de las inversiones para la investigación y el desarrollo energéticos debería invertirse. El gasto público agregado debería incrementarse a 20 billones de dólares anuales.
Recursos
• Sería necesario establecer un fondo para el cambio climático con recursos adicionales, que comience en 10 billones de dólares y llegue hasta 50 billones de dólares anuales, y se dedique al apoyo de actividades relacionadas con el cambio climático en países en desarrollo (adaptación, lucha contra la deforestación y empleo y desarrollo de energías limpias).
• El Mecanismo de Desarrollo Limpio (MDL) debería reformarse con el fin de aprovechar su potencial global. Por otra parte, un nuevo mecanismo de mercado debería apoyar la transformación sectorial de los países rápidamente industrializados.
Sobre LGAC: La iniciativa Liderazgo Global para la Acción Climática fue creada por el Club de Madrid y la Fundación Naciones Unidas con el fin de movilizar la voluntad política para la acción a largo plazo que ayude a prevenir el catastrófico cambio climático. Basada en la experiencia política de los miembros del Club de Madrid y la Fundación Naciones Unidas, LGAC la forman seis ex jefes de Estado, siete ex jefes de gobierno y 12 líderes procedentes del gobierno, las empresas y la sociedad civil, que juntos representan a más de 20 países.
La presidencia de LGAC la tiene Ricardo Lagos, presidente del Club de Madrid y enviado especial de Naciones Unidas para el Cambio Climático, y Timothy E. Wirth, presidente de la Fundación Naciones Unidas. Se puede encontrar información adicional, con la lista completa de los miembros de LGAC, en www.globalclimateaction.com .
Club de Madrid (www.clubmadrid.org)
El Club de Madrid es una organización independiente dedicada al fortalecimiento de la democracia en el mundo apoyándose en la experiencia y recursos únicos de sus miembros, 66 ex jefes de Estado y de gobierno democráticos. En colaboración con otras organizaciones y gobiernos que comparten sus objetivos de promoción de la democracia, el Club de Madrid facilita asesoramiento de sus miembros a otros líderes y proporciona apoyo estratégico y asistencia técnica a líderes e instituciones que trabajan en procesos de transición y consolidación democráticas.
Fundación Naciones Unidas (www.unfoundation.org)
La Fundación Naciones Unidas se creó en 1998 con el histórico billón de dólares que el empresario y filántropo Ted Turner cedió a Naciones Unidas para apoyar las causas y actividades de la organización. La Fundación construye e implanta asociaciones y alianzas entre los sectores público y privado para abordar los problemas más acuciantes de todo el mundo, y también trabaja para aumentar el apoyo para las Naciones Unidas a través del respaldo y del alcance público. www.ecoportal.net .
Fuente: Ecoportal
