El organismo afirma que el ritmo actual de pérdida de especies debido a actividades humanas es más de 100 veces superior a la extinción natural
PARÍS.— Tras dos años de ásperos debates, más de 90 países acaban de aprobar la creación de un grupo internacional de expertos científicos que elaborará un informe sobre la biodiversidad del planeta, que debe servir de base a decisiones políticas como ya ocurre con el clima.
La IPBES (Plataforma Intergubernamental sobre Biodiversidad y Servicios de Ecosistemas) será equivalente al IPCC (Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático) de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), encargado de asesorar a las autoridades sobre el calentamiento global y de orientar su respuesta.
En momentos en que muchos científicos consideran que la Tierra está en vísperas de su sexta gran ola de extinciones, la elaboración de este informe aparece como indispensable.
Según la ONU, “el ritmo actual de pérdida de especies debido a actividades humanas es más de cien veces superior a la extinción natural”.
“Debemos por fin tener conciencia de que la desaparición de la biodiversidad es crucial para el desarrollo. Sus efectos para el futuro de la humanidad, la seguridad y el desarrollo son tan importantes como en el caso del cambio climático”, indica Chantal Jouanno, secretaria de Estado francesa de Ecología.
La IPBES “nos permitirá medir nuestra dependencia con respecto a la biodiversidad y nos dará los medios para actuar”, considera.
Así, en 2002, los Estados se habían fijado como objetivo “detener” la erosión de la biodiversidad de aquí a 2010, sin contar con indicadores ni base científica, lo que condenó al fracaso esta ambición.
“La IPBES debe llenar este vacío”, señala Lucien Chabasson, subdirector del IDDRI, el Instituto para el Desarrollo Sostenible y Relaciones Internacionales en París, que considera el empeño “más complejo” que el del IPCC.
Esta decisión fue aprobada en Corea del Sur bajo los auspicios del Programa de Naciones Unidas para el Medio Ambiente, y debe ser refrendada en septiembre por la Asamblea General de la ONU, en Nueva York.
Fuente: El Nacional
