El hollín y el metano emitidos por la combustión en cocinas poco eficientes son contaminantes que contribuyen al cambio climático
Teorema Ambiental/Redacción
Alrededor de tres mil millones de personas en el mundo cocinan y calientan sus hogares con fogones a fuego abierto en los que queman biomasa, es decir, madera, excrementos de animales o residuos agrícolas y carbón. En su mayoría se trata de familias de escasos recursos que viven en países en desarrollo.1
Estos métodos poco eficientes —combinados con viviendas mal ventiladas— aumentan los niveles de contaminación del aire. La Organización Mundial de la Salud (OMS) explica que este humo puede producir concentraciones de partículas finas 100 veces superiores a las aceptables, en tanto que el hollín y el metano emitidos son contaminantes que contribuyen considerablemente al cambio climático.2 De acuerdo con el Banco Mundial, las emisiones de dióxido de carbono (CO2) en México por el consumo de combustibles sólidos alcanzan las 48 mil 984 kilotoneladas.3
Por otra parte, se estima que mil 600 millones de personas, es decir, el 25 por ciento de la población global, depende de los bosques para alimentarse y obtener fuente de energía, sin embargo, hasta 13 millones de hectáreas de bosques desaparecen cada año por la acción del hombre.4 Asimismo, la Organización de las Naciones Unidas (ONU) explica que debido a la alimentación y la agricultura, la deforestación manda a la atmósfera dos mil millones de toneladas de carbono al año.
Debido a esta problemática surgió Envirofit, un emprendimiento social que llegó hace dos años a México para mitigar los efectos por cocinar a fuego abierto, esto mediante el diseño de una estufa (Ecofogón®) que si bien aún usa leña, puede reducir su consumo en más del 80 por ciento y disminuir las emisiones de humo en más del 90 por ciento. Gracias a 1.3 millones de ecofogones vendidos a escala global, la empresa ha logrado evitar la propagación de 22 millones de toneladas de CO2, y ha salvado 52 millones de árboles.
Actualmente, la compañía sirve a más de cinco millones de personas en comunidades necesitadas alrededor del mundo. Asimismo, ha superado el millón de bonos de carbono vendidos, que de acuerdo con Gold Standard Foundation (GSF), su impacto es equivalente a la inversión de 151 millones de dólares en empleo, medios de subsistencia, salud y clima certificado.5
Envirofit trabaja de la mano con la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático (CMNUCC), así como con el GSF para certificar las reducciones de emisiones de CO2 del uso doméstico de estufas y para emitir los créditos de carbono correspondientes.
