Son espacios agradables y producen paz y tranquilidad, captan carbono y ayudan a disminuir el impacto del cambio climático
Teorema Ambiental/Redacción
La bióloga responsable del humedal artificial del Bosque de San Juan de Aragón, de la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema) de la Ciudad de México, Miriam Vargas Ortega, explicó la importancia de la conservación de estos cuerpos de agua que, además de permitir la captación de carbono para disminuir el cambio climático, ofrecen un incremento de la biodiversidad.
“Los humedales son espacios importantes no solo a nivel nacional e internacional, ha habido mucha pérdida de estos espacios porque a veces los consideramos no muy gratos en cuestiones de que a veces un humedal también es un pantano. A veces pareciera que se ha menospreciado a estos sistemas”, aseguró Vargas.
Si no existieran estos cuerpos de agua se rompería la cadena trófica natural ya que ofrecen diferentes servicios ambientales. Son espacios agradables y que producen paz y tranquilidad, captan carbono y ayudan a disminuir el impacto del cambio climático.
La bióloga explicó que el humedal del Bosque de San Juan de Aragón surgió con la idea de limpiar los contaminantes del lugar. En un inicio permitió la remoción de contaminantes y mejoró la calidad del lago y en la actualidad ha sumado otros beneficios como la biodiversidad de fauna que atrae este sistema, agregó.
“Los animales que más vemos aquí son las aves, un grupo de animales muy característico y empático entre la población, pero no son los únicos. Hemos visto el aumento desde la parte de los insectos, que es la base de la cadena alimenticia, de ahí vienen los peces, las aves u otro tipo de animales que a lo mejor no se ven a simple vista pero que se han enriquecido con la puesta en marcha de este humedal artificial”, precisó la responsable técnica.
Además, ha permitido el regreso y aumento de algunas diversas especies, como el águila pescadora, el pelícano y algunas clases de zambullidores.
En materia de vegetación, dijo que en el humedal artificial habitan alrededor de 17 especies, entre las que destacan la tifa, el carricillo, la ninfa mexicana y otras variedades de tule.
