Inventario Nacional de Árboles Notables de México, realizado por la organización no gubernamental Reforestemos México, con el apoyo de la Comisión Nacional Forestal (Conafor), cuenta ya con un total de 30 árboles inventariados y pretende ampliarlo.
El coordinador de cultura forestal de Reforestemos México, Atzin Calvillo, dijo que México es considerado por muchos expertos “un país muy diverso”, con una riqueza de más de 25 mil especies vegetales, de las que 10 por ciento son forestales.
Por ello consideró “importante y necesario” iniciativas como la de este inventario que permiten mantener esa diversidad y hacer que los árboles sean considerados “ejemplares de conservación carismáticos”.
Calvillo explicó que la iniciativa surgió hace dos años, a partir de un concurso de fotografía en el que se buscaba que la población fotografiara árboles curiosos con el fin de promover la cultura forestal.
“El concurso tuvo una participación notable y fue cuando se pensó que muchos de los árboles podrían formar parte de un catálogo forestal virtual para que la gente pudiera consultar y saber más de estas joyas de la naturaleza”, apuntó.
Los árboles están considerados como “majestuosos” no sólo por esta organización sino también por “prestigiosas entidades” como la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) o por la Comisión Nacional Forestal.
Dentro de la recopilación hay árboles que han sido importantes testigos de la historia de México, como es el caso de un fresno de más de 200 años situado en la Universidad Autónoma Chapingo.
Bajo su sombra, el general Porfirio Díaz y el político Manuel González (dueño entonces de la finca en la que se encontraba este árbol) firmaron numerosos acuerdos presidenciales.
En la actualidad, la Universidad aún toma decisiones importantes en el manejo de la institución al pie del árbol con altura de 31 metros. También hay otros árboles en el atlas cuya existencia tiene un marcado carácter religioso como es el caso del árbol sagrado del Santuario de Chalma, en el Estado de México (centro del país).
Este ahuehuete o ciprés mexicano de más de 200 años y 38 metros de altura es un santuario religioso ya que los peregrinos lo visitan antes de acudir a ver la iglesia del Señor de Chalma.
Los caprichos de la naturaleza hacen que puedan existir maravillas como el árbol del Tule, en el estado de Oaxaca (sureste de México), uno de los ejemplares más antiguos y más grandes del mundo.
Este ahuehuete tiene casi dos mil años, una altura de 40 metros y su tronco tiene un perímetro de 42 metros.
Se ha calculado que a su sombra pueden cobijarse más de 500 personas y que hacen falta 30 personas agarradas de las manos para llegar a abarcar su perímetro.
El atractivo principal de este árbol es que su tronco y sus ramas presentan numerosas formas conocidas popularmente como “el elefante”, “el león” , “la piña” o “el pez” .
Estas y otras historias están disponibles en el Inventario Nacional de Árboles Notables de México, en la página http://www.arbolesmajestuososdemexico.org/ en donde además todo el que lo desea puede colaborar en el proyecto y registrar un ejemplar.
Fuente: El Universal
