Con cerca de 30 años de operar en México, Ondeo Degrémont ha invertido en el país (tan sólo en los últimos 5 años), aproximadamente 300 millones de dólares en la construcción, operación y mantenimiento de plantas de tratamiento de aguas distribuidas en lugares como Ciudad Juárez, Chihuahua, Culiacán, Sinaloa, Puebla y San Luis Potosí y tiene en el país más de 400 referencias.
Además de preservar y cuidar la salud de los habitantes de estas importantes ciudades mexicanas, al evitar la contaminación de origen microbiológico, Ondeo Degrémont controla el deterioro ecológico ya que no permite que las aguas residuales crudas contaminen las tierras agrícolas y las fuentes potenciales de agua potable.
Otro de los objetivos de la empresa de origen francés es rescatar el río Culiacán, controlando la contaminación de este cuerpo receptor. Además, gracias a sus actividades, Ondeo Degrémont genera la factibilidad de censo del agua tratada, dado que el tratamiento primario avanzado permite conservar en el agua nutrientes importantes para el riego de zonas agrícolas.
Ondeo Degrémont cumple cavalmente con la normatividad actual mexicana, como es la NOM-001-ECOL-1996 y en muchos casos va más allá, ya que por ejemplo, con la aplicación de biosólidos, brinda a los distritos de riego un excelente mejorador de los suelos al contener macro y micronutrientes.
Volúmenes importantes de agua
Patrice Keime, presidente del grupo en México, señaló que las necesidades del país son en gran parte satisfechas gracias a la operación de Ondeo Degrémont, que actualmente desarrolla el 30 por ciento de los proyectos en el ámbito municipal y el 35 por ciento en el sector industrial.
En el ámbito municipal el objetivo consiste en sanear aguas negras. En Ciudad Juarez se maneja un caudal de 3,500 litros por segundo, en Culiacán 1,700 litros.
Para Ondeo Degrémont, filial del Grupo Suez, en los municipios mexicanos existe una oportunidad enorme de negocio porque el 75 por ciento de las aguas negras generadas no recibe tratamiento y en el sector industrial sucede algo muy similar. De hecho, para satisfacer su demanda de agua, la industria requiere inversiones en infraestructura por arriba de 5,000 millones de dólares.
La filosofía de Ondeo Degrémont y de Ondeo Services, empresa especializada en la gestión integral del agua, es llevar a cabo una auténtica lucha por el agua mediante acciones concretas como: el tratamiento de aguas negras y el reuso de agua tratada, reducción de fugas en las redes de distribución, optimización del uso industrial del agua, mecanización del riego agrícola y desarrollo de cultivos más rentables y menos consumidores de agua.
Ondeo Degrémont eligió a México como el país donde más capital ha inyectado y donde es importante concretar asociaciones a largo plazo entre los sectores público y privado, con el propósito de tener acceso a tecnologías de punta, lograr experiencias exitosas nacionales e internacionales en materia de gestión integral del agua y buscar nuevas fuentes de financiamiento.
Ondeo Degrémont cuenta con equipos que digieren los lodos antes de deshidratar para facilitar su transporte. Lo que queda de ellos, puntualizó Keime, va a parar a rellenos sanitarios o reuso agrícola. La incineración, aunque es un proceso muy caro, y más para un país como México, es un proyecto que se tiene previsto echar a andar en el mediano plazo. Sin embargo, aclaró el funcionario, primero hay que agotar la posibilidad de reuso de los lodos y después buscar su incineración. En Francia, por ejemplo, se incineran los lodos, y ese poder calorífico se utiliza en la cogeneración de energía.
Vocación integral de Agua Process
La empresa Agua Process, filial de Ondeo Degrémont, hace apenas 3 años opera y se encarga del mantenimiento de las plantas de tratamiento de agua que hay en el país. Su crecimiento ha sido muy importante, ya que actualmente trabajan en Process casi 200 personas.
La función que cumple Agua Process, empresa con certificación ISO 9001:2000, coincide con la vocación del grupo de crear infraestructura, operarla de manera adecuada, mantenerla y darle un mejor rendimiento. Para lograr estos objetivos, Ondeo Degrémont cuenta con ingenieros mexicanos bien capacitados, en especialidades como ingenieros químicos, ingenieros mecánicos, operadores y técnicos en operación y mantenimiento.
Ondeo Degrémont también contruyó y opera una planta de tratamiento de agua para Petróleos Mexicanos (Pemex) en Salina Cruz, que además es desalinizadora de agua de mar. En ella se procesan 150 litros por segundo.
De esta manera, las inversiones de Ondeo Degrémont en las plantas de tratamiento dependen del caudal de agua a tratar y del tipo de sector o actividad al que se está apoyando. Siempre hay que tomar en cuenta que el acceso al agua es cada día más difícil y costoso.
En este contexto, el objetivo central de Ondeo Degrémont consiste en que aparte de cuidar el medio ambiente, es urgente minimizar el consumo de agua.
El rescate del río Culiacán
En Sinaloa, el principal objetivo de Ondeo Degrémont consiste en recuperar la calidad del agua del río Culiacán, con la construcción y operación de la planta de tratamiento de aguas y cuyo monto de inversión fue de 253 millones de pesos (a valor de Agosto de 1998).
La planta, en su primera etapa, cuenta con los siguientes procesos: pretratamiento, tratamiento primario avanzado, cloración, espesamiento de lodos, digestión anaerobia y deshidratación de lodos. Cerca de 745,000 son los habitantes que se verán beneficiados con la construcción de esta planta, la cual a su vez estará operada por Agua Process durante 20 años.
La planta de tratamiento está operando desde febrero de 2002 y a sólo 4 meses de iniciados sus trabajos, sus objetivos primarios han sido superados, pues se han logrado eliminar más del 70 por ciento de los sólidos, más del 50 por ciento de la contaminación orgánica y el 99.9 por ciento de los coliformes fecales, principales causantes de las enfermedades gastrointestinales.
La segunda etapa de la planta de tratamiento se concentra en el manejo adecuado de lodos activados. Es decir, mediante el proceso de digestión anaerobia se permitirá reducir el volumen de los lodos y al mismo tiempo “sanearlos” para reutilizarlos en el campo agrícola como abono y nutriente.
