El Programa para la Modernización de Organismos Operadores de Agua (Promagua) tiene como objetivo primordial apoyar técnica y financieramente a los organismos que prestan el servicio de agua potable, ya que éstos enfrentan problemas como infraestructura en malas condiciones y pasivos que superan los 72,000 millones de pesos.
La recaudación anual que logran los operadores del servicio asciende a poco más de 14,000 millones de pesos, cifra que casi en su totalidad se destina a la operación. Los niveles de recaudación son muy bajos, debido a que en promedio de cada 1,000 litros que se producen, sólo se cobran 300 y las tarifas tampoco son un reflejo de los costos reales.
La media de la recaudación es de 1.40 pesos por metro cúbico, mientras que el costo promedio es de cinco pesos, además de que los operadores cuentan con una infraestructura en malas condiciones porque ya ha rebasado su vida útil. Esto, a su vez, ha provocado que no cumplan con los pagos de derechos por uso de aguas nacionales y por las descargas de aguas residuales.
A su precaria situación económica hay que agregar que los operadores no pueden responder con efectividad y prontitud al creciente aumento de la demanda y además se enfrentan a una baja disponibilidad de fuentes de agua, ya sea por agotamiento o por contaminación.
Hay que destacar que el Promagua es una iniciativa del Ejecutivo federal, que por conducto de la Comisión Nacional del Agua (CNA) y del Banco Nacional de Obras y Servicios Públicos (Banobras) aportará recursos no recuperables que representan entre 20 y hasta 49 por ciento de los recursos de los programas de inversión de estos organismos operadores.
Modernización en todos sentidos
El propósito del Promagua consiste en impulsar la eficiencia física y comercial, facilitar el acceso a la tecnología de punta, ampliar las coberturas de agua potable y saneamiento, fomentar la autosuficiencia y promover el cuidado del medio ambiente, con la participación de los sectores social y privado.
Para la etapa inicial del programa se requiere elaborar un estudio de diagnóstico y planeación integral, del que 75 por ciento será financiado por la federación y el otro 25 por ciento por los gobiernos estatales, municipales o por los propios organismos operadores.
El Promagua va dirigido de manera preferente a las localidades de más de 50,000 habitantes que concentran el 54 por ciento de la población total del país. Los beneficios serán múltiples: representa una fuente adicional de recursos, garantiza la continuidad en la gestión administrativa, promueve el cambio estructural, profesionaliza los niveles gerenciales, promociona la cultura del agua, se adecua y moderniza el marco legal y tarifario.
El programa contempla también la realización de inversiones para el suministro e instalación de macromedición, recuperación de caudales, sectorización de la red, detección y corrección de fugas, elaboración de un padrón o registro confiable de usuarios, así como una ágil facturación, cobranza, contabilidad y sistemas de información.
