Donde los sectores público, privado y comunidades beben de la misma agua
Guanajuato, 29 de julio de 2021.— Según el “Programa Conjunto de Monitoreo (JMP) OMS/Unicef para el suministro de agua, el saneamiento y la higiene”, al 2020, una de cada cuatro personas en el mundo carece de acceso a agua potable y en México un 57 por ciento no cuenta con este servicio gestionado de forma segura.
En el estado de Guanajuato, el involucramiento de las autoridades estatales y federales, la gestión de entidades públicas y privadas, y la decidida participación de comunidades, favorecen el acceso a los servicios de agua, saneamiento e higiene (ASH).
Alineado con las prioridades de los gobiernos nacional y estatal, el Programa Lazos de Agua, a través del modelo A·B·C para la Sostenibilidad™ y del enfoque Arte Social para el Cambio de Comportamiento™ (SABC, por sus siglas en inglés), ambos de la Fundación One Drop™, se integró al programa rural de agua y saneamiento del estado. Así, Living Water International, la Comisión Estatal del Agua de Guanajuato (CEAG) y la Comisión Nacional del Agua (Conagua) implementan desde 2017 el “Proyecto Guanajuato”.
Modesto Carrillo Mejía, líder de Cambio y miembro del comité de agua de Xoconoxtlito del Llanito, comunidad que participa en el proyecto, expresa que antes el agua no llegaba de forma adecuada: a unos les llegaba mucha agua y a otros solo una o dos horas al día. A la fecha, se ha facilitado el acceso sostenible a agua potable a más de 47 mil personas en 95 comunidades rurales y periurbanas del estado, fortaleciendo capacidades técnicas de gestión del agua, adoptando comportamientos clave y mejorando el acceso a productos y servicios ASH.
Juan Gabriel Segovia, director de Gestión Social en la CEAG, celebra la colaboración entre los actores del proyecto en diversos frentes: “El Programa Lazos de Agua se ha venido a sumar a las estrategias que se implementan en Guanajuato a través del gobierno del estado como complemento en el rubro de participación social comunitaria, con la finalidad de garantizar la sostenibilidad de los servicios de agua, drenaje y saneamiento. Con ello se despierta el interés para cuidar la infraestructura y por supuesto el vital líquido, detonador de desarrollo, para que más habitantes puedan contar con un servicio digno que mejore la calidad de vida de las familias del medio rural.”