Sólo en México se incendian los ríos
Debido a las altas concentraciones de petróleo arrojadas de manera irresponsable por diversas industrias establecidas en torno al río Temascatío, en Salamanca, Guanajuato, el miércoles de la semana pasada se incendió esta línea hídrica, según publicó el periódico Correo.
El ambientalista Carlos Álvarez declaró al diario: “No queremos que cierren las 30 empresas que contaminan el Temascatío, per sí queremos que tengan vergüenza y sean sancionadas para que se remedie el daño ocasionado.”
El presidente de la asociación civil México, Comunicación y Ambiente lamentó que los empresarios quieran dejar de lado su responsabilidad con el medio ambiente arguyendo que para financiar procesos más limpios tendrán que disminuir empleos.
“Lo que queremos es que tengan vergüenza y que cumplan las normas oficiales que se tienen desde toda la vida, que son ocurrencia nuestra, pero hay inspectores corruptos de la Conagua (Comisión Nacional del Agua) y de la Profepa (Procuraduría Federal de Protección al Ambiente) que se siguen haciendo tontos y no aplican la ley, porque de hacerlo estas empresas tendrían clausuradas sus descargas y pagarían costosas multas.”
Carlos Álvarez criticó directamente la medida adoptada por el ex gobernador Juan Oliva Ramírez, quien impulsó el proyecto para entubar una parte del tramo del río. “El chiste no es desviar ningún cuerpo de agua porque la contaminación sigue siendo la misma (…), la solución es muy simple, las 30 empresas tienen que poner sus plantas de tratamiento y manejar adecuadamente sus residuos.”
En este sentido, dijo que esperan que los nuevos funcionarios tengan voluntad de resolver la problemática ambiental en Salamanca “que es más grave cada día”.
Y es que, aseguró, a la contaminación del Temascatío se debe sumar el Cerro de la Cruz, el caso Tekchem y los lodos residuales de la Comisión Federal de Electricidad.
Apuntó que es una vergüenza que se haya prendido el río “pero sólo en México pasa esta situación, ya se prendió el río Lerma y ahora el Temascatío, eso es un récord”.
Fuente: Periódico Correo
